El 5 de diciembre de 1831, después de una misa de acción de gracias, el venerable Luis Querbes firmaba sus promesas de sacerdote catequista. Poco tiempo después recibirá a los primeros catequistas: Pedro Magaud y Pedro Liauthaud. El primero había estado a su lado durante toda la maduración del proyecto, el segundo es un maestro de 38 años que ya enseñaba desde hacía 20 años y más tarde será el brazo derecho del Padre Querbes.
En el año siguiente, 1832, también se agregan Tomás Nogier y Jaime Damoisel. En este momento componen la sociedad naciente además de su director 4 catequistas que dirigen cuatro escuelas: Vourles, Brignais, Panissieres y Francheville.
Había que encontrar un local capaz de acoger a los aspirantes y de reunir a los miembros de la asociación. Un inmueble adosado a la iglesia parecía el más adecuado. Con la ayuda de las señoras Comte y la señorita Lamoureaux pudo adquirir en agosto de 1832 esta casa grande de dos pisos con sus dependencias. Se convirtió en la cuna (berceau) de la sociedad. Aún hoy existe y lleva este nombre; es nuestra casa madre.