El cardenal Carlos Osoro nos propone estos tres rasgos: «1º. Salida misionera: el ‘id’, salir a anunciar a las periferias existenciales, es decir, a aquellos que a veces no creen, que están al margen o que, si creen, pus no van a practicar mucho. 2º. Salir bajo el signo de la misericordia. No vayas a ir diciendo: “Es que tenéis que ir a misa todos los días, no sé cuántos, la misa…”. Déjate de cuentos: ¡quiere a la gente! Como es, no como quisieras que fuese… 3º. Y no solamente está la salida misionera y llevar la misericordia del Señor. Tiene que haber un diálogo. Nuestro laboratorio es el diálogo: yo tengo que ser la prolongación del diálogo de Dios con cada ser humano…».*
Emprendemos un nuevo curso pastoral. Te proponemos estos tres signos que tú, como catequista, seguro los llevas anclados en tu corazón. Gracias por tu ministerio, por tu necesario y fundamental servicio eclesial. Septiembre es el mes de ‘salida’ de este nuevo curso, con esa actitud ‘en salida’ que nos proponía el venerado papa Francisco a toda la Iglesia. ¡Gracias, catequista! Que el Señor te regale a ti y os regale a todos los catequistas de tu comunidad un saleroso y fructífero curso.
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